Soy muy fan del arroz…. que si a banda, en paella, meloso, caldoso, risotto o en su versión dulce, arroz con leche que es uno de mis postres favoritos.
Hace varios fines de semana, pensando en qué podía poner de comida se me ocurrió mezclar dos de mis ingredientes favoritos, el arroz y el secreto. Como en sí ya me pareció un plato con cuerpo decidí ponerlo con verduritas y no recargarlo más.
El resultado fue sensacional. Como toque pícaro comentaros que le puse un par de guindillas que hicieron que el arroz, además de alimentar, curase catarros… Con la de virus que pululan en el ambiente así matamos dos pájaros de un tiro. Si vosotros preferís prescindir de ese punto alegre simplemente no le pongáis las guindillas (guillermas que les llamamos en casa con confianza).
No me enrollo más y os dejo con la receta, si vosotros también sois fanes del arroz y del secreto no lo dudéis, es vuestro plato!!
Ingredientes (3 personas);
- 2 piezas de secreto ibérico de cerdo.
- 8 champiñones.
- un pimiento amarillo.
- una cebolleta.
- 200 grs. de judías verdes.
- una lata pequeña de guisantes.
- 2 guindillas.
- sal y pimienta.
- aceite de oliva virgen extra.
- 3 pocillos de café de arroz (en mi caso de grano largo)
- 6 pocillos de café de agua caliente.
Limpiamos las piezas de secreto del exceso de grasa que traen y las cortamos en trozos según nuestro gusto, preparado ya para el arroz. Sal pimentamos.
En la olla donde vayamos a hacer el arroz ponemos un buen chorro de aceite de oliva virgen extra a fuego alto.
Doramos el secreto y reservamos.
Bajamos el fuego y añadimos un poco más de aceite a los jugos que sobraron de dorar la carne.
A fuego medio bajo añadimos la cebolla y el pimiento y rehogamos un par de minutos.
Añadimos las judías que previamente habremos lavado y retirado extremos y laterales, cortadas en trozos más o menos del tamaño de la cebolla. Añadimos también las dos guindillas. Si queréis un extra de picante partidlas antes de añadir.
Cuando la cebolla empiece a estar transparente añadimos la carne y los champiñones y damos unas vueltas. Añadimos el arroz y rehogamos todo junto un par de minutos.
Rehogamos unos minutos y añadimos el agua.
Rectificamos de sal y dejamos hacer a fuego medio bajo hasta que el arroz haya absorbido casi todo el agua, en ese momento añadimos los guisantes y dejamos que termine de absorber el caldo.
En este punto retiramos del fuego, tapamos y dejamos reposar 5 minutos. Pasado este tiempo servimos.
Nada más que añadir, un buen pan, un buen vino y la fiesta está servida.
Que paséis buen fin de semana, y no os paséis siendo buenos 😉
Recordad que hay que andar, que también anda el Alsa.....
Tito al moro!!!
Uauuuuuuuuuuuuuuuuuuu impresionante ese pedazo de arroz con todo ese sabor!
me parece una muy buena combinación de sabor, aunque yo siempre prefiero darle algo de color al arroz ( prefiero que no aparezca como tan…blanco), pero bueno es un matiz muy mío.