Ya sabéis que tengo verdadera perdición por los bizcochos y los bollos…. Me gustan en todas sus formas, olores y sabores y la verdad es que este blog da buena cuenta de ello.

Además recientemente me he aficionado mucho a la naranja, en cuanto a repostería se refiere. La culpa la tuvieron Miss Magdalenas. En la búsqueda de la receta de magdalena perfecta encontré esta, en la cual el aroma de la ralladura de naranja es básico para conseguir ese sabor tan característico y que hace que estas magdalenas tengan tanto éxito. A raíz de ahí todo bollo que lleve naranja me llama como la luz a una polilla.

Así que, en uno de esos repasos semanales a «qué se cuece en la nube» me encontré con esta receta de bizcocho de naranja de Pam, de Quiero Cupcakes.

Me llamó la atención por su sencillez, su apariencia y como no, por la naranja. Así que me faltó tiempo para ponerme manos a la obra y el resultado fue tan bueno como el esperado.

Es un bizcocho jugoso y con un sabor a naranja sensacional. Además es muy ligero, no sé si eso es bueno, porque permite darle paso sin despeinarte.

El caso es que, si como a mi, os gustan los bizcochos caseros, no dejéis de probarlo; está sencillamente sensacional.

Si os apetece ver las otras recetas de bizcochos que tengo publicadas pinchad aquí.

Os dejo con la receta.

Ingredientes:

  • 3 huevos L (o 4 M)
  • 180 grs. de azúcar blanco
  • 120 ml. de aceite suave de oliva o girasol (yo usé girasol).
  • 125 grs. de yogur natural.
  • 80 ml. de zumo de naranja.
  • Ralladura de una naranja (solo la parte naranja, que la blanca amarga, como yo a veces..)
  • 250 grs. de harina de trigo todo uso.
  • 1 sobre de polvos químicos para hornear o levadura Royal (15 grs).
  • un pellizco de sal.

Precalentamos el horno a 180º con calor arriba y abajo.

Batimos los huevos con batidora de varillas, o a mano con una varilla (y así podéis prescindir de hacer brazo en el gimnasio) hasta que estén bien espumosos y hayan blanqueado.

Añadimos el azúcar y le damos más caña hasta que se integre bien con los huevos.

A continuación el aceite de girasol, integramos bien y hacemos lo propio con el yogur natural.

Después agregamos el zumo de naranja y la ralladura y mezclamos.

Por último añadimos la harina, los polvos de hornear y la sal previamente pasados por un colador para tamizarlos. Los mezclamos a velocidad muy lenta lo justo para que se integren y no haya grumos, pero sin batir demasiado para que no se desarrolle el gluten de la harina.

Vertemos la mezcla en el molde que más nos guste o el que más a mano tengamos previamente engrasado con aceite y harina, mantequilla y harina o spray desmoldante. Yo usé uno redondo de 20 cm de diámetro. Pam en vez de engrasar pone papel de horno, es otra opción pero a mi ponerme a cortar el papel me da mucha más pereza que engrasar, así que como gustéis…..

Horneamos entre 45 minutos y una hora a 180º calor arriba y abajo, yo puse el molde a media altura en el horno.

Os recomiendo, a partir de los 45 minutos pinchar el bizcocho con un palillo. Cuando éste salga seco el bizcocho estará listo y lo podéis sacar.

Dejamos que pierda calor 10 minutos y pasado este tiempo desmoldamos y dejamos enfriar del todo sobre una rejilla.

Cuando esté completamente frío lo pasáis a un plato o una fuente redonda y le dais cañita brava… Con café, leche, infusión, sólo …. cualquier excusa es buena.

Ya veis que es un bizcocho sencillisimo de hacer y está muy bueno, a mi es que cada día la naranja en la repostería me gusta más….

Si os animáis ya me comentaréis, que sé que sois galdrumas como yo.

Que tengáis buena semana.

Recordad que hay que andar, que también anda el Alsa.....
Tito al moro!!!

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