Una de las primeras recetas que publiqué en mi blog, y también de las que me siento más orgullosa, fue aquella versión de la bica de mantequilla. La bica es un postre típico de la provincia de Ourense y que varía según la zona donde la preparen. La más conocida es la bica mantecada de la zona de Castro Caldelas y Trives.
Esta que preparo hoy  es típica de un pueblo del sur de Ourense, Laza, conocido por sus carnavales, considerados uno de los 10 más ancestrales del plantea, ahí es nada. Esta bica se prepara solo con claras de huevo, nata, azúcar y harina, no lleva mantequilla ni manteca, y tiene un sabor realmente suave.
Yo la vi por primera vez en el blog de Loly Llano, O Garfelo. Si queréis ver su receta pinchad aquí. Desde entonces la verdad es que ha aparecido en un montón de blogs, y yo que ya la tenía en pendientes no me pude resistir.
Como ya os he comentado, esta bica tiene un savor muy suave. Está muy rica, aunque yo he de reconocer que me inclino más hacia la versión con mantequilla, que es uno de mis bizcochos favoritos (engorda con solo ver para ella dicho sea de paso… pero compensa).
Por cierto comentaros que para esta receta usé las claras pasteurizadas de Mercadona. Simplemente por comodidad, me parecen muy prácticas si tenéis a mano uno de estos supermercados, sino ya sabéis, con las yemas a preparar algún otro postrecillo rico.
Nada más lechones, os dejo con la receta. Que la disfrutéis.

Ingredientes:

  • 8 claras de huevo (yo utilicé las claras pasterizadas del mercadona).
  • 350 grs. de harina.
  • 350 ml. de nata.
  • 435 grs. de azúcar (necesitaremos un poco más para espolvorear).

Precalentamos el horno a 180º.
Lo primero será montar las claras a punto de nieve (yo le añado siempre a las claras una pizca de sal para que se monten mejor). Llegado ese punto añadimos el azúcar y montamos hasta obtener un merengue consistente.

Llegado ese punto vamos añadiendo la harina poco a poco batiendo suavemente hasta que esté completamente integrada.

A parte montamos la nata (recordad que tenéis que tenerla en el frigo hasta el momento de montarla, sino puede cortarse).
Una vez la nata está montada añadimos al a mezcla de las claras y con una espátula vamos integrando con movimientos envolventes.

Cubrimos un molde rectangular (tipo lasaña) con papel vegetal y ponemos la mezcla en él. Espolvoreamos la superficie con azúcar.

Llevamos al horno unos 45 minutos o hasta que al pinchar con un palillo este salga seco.
Sacamos del horno y dejamos enfriar.

Podemos sacar la bica del molde y guardarla en una lata, así se conservará mejor.

A mi la bica me gusta cortarla en cuadraditos para servirla, me parece que presta más.
Y poco más os cuento sobre esta receta, muy sencillita, animaos a probarla.
Que paséis una buena semana lechones, y ya sabéis: Tito al moro!!!

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